La crisoprasa

Santa Hildegarda describe poéticamente su formación: «La crisoprasa se forma cuando el sol se ha ocultado completamente: en ese momento el aire y el agua son más turbios y tienen un color verde». (Physica, capítulo XIII)

Santa Hildegarda atribuye muchas virtudes diferentes a la crisoprasa, las cuales corresponden a distintos usos. A menudo basta con poner la piedra en contacto directo con la piel o mantenerla cerca de ella, de modo que todos los tipos y formas de piedra resultan adecuados. Pero para apaciguar la ira, se aconseja llevar una crisoprasa al cuello, así que un collar o un pendiente serían muy apropiados.

CRISOPRASA

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